Roma, 12 nov (Prensa Latina) Tras subir al trono en 1987 y 1990, amparados en la majestuosidad de Diego Armando Maradona, el Nápoles está cada vez más cerca de volver a levantar el título del fútbol de Italia, y su triunfo de hoy sobre el Udinese así lo confirma.
Los napolitanos mantuvieron su desenfrenada capacidad goleadora y superaron al equipo de Udine por 3-2, para llegar a 37 tantos (y solo 12 en contra) en los primeros 15 partidos de la Serie A.
El nigeriano Victor Osimhen, el polaco Piotr Zielinski y el macedonio Elif Elmas fueron los encargados de sentenciar el partido en San Paolo.
Con el 3-0 en el marcador, los dueños de casa se relajaron visiblemente y el Udinese, prácticamente de la nada, metió el pie en el acelerador y puso el choque al rojo vivo con dos goles en tres minutos (entre el 79 y el 82), a la cuenta del también macedonio Ilija Nestorovski y el alemán Lazar Samardzic.
Sin embargo, la sangre no llegó al río y los napolitanos lograron preservar la ventaja en las postrimerías y asegurar tres puntos vitales en sus aspiraciones de coronación.
Esta significó la oncena victoria consecutiva de los sureños en el campeoanto liguero. La última vez que no alcanzaron el triunfo en la Serie A fue el pasado 31 de agosto, al empatar 1-1 ante el Lecce.
De esa manera, el Nápoles llegó a 41 puntos en la primera posición del campeonato, 11 por delante de sus más cercanos perseguidores, el AC Milán (vigente campeón) y el Lazio.
La escuadra del sur de Italia solo ostenta dos títulos en la historia de la Serie A, 1987 y 1990, ambos logrados en los tiempos mágicos de Maradona, por lo que cada vez que se acerca la posibilidad de una nueva coronación todos los fans empiezan a encenderle velas al genio argentino de Villa Fiorito.
Además de comandar la Liga de Italia, vale recordar que los discípulos de Luciano Spalletti lideraron el grupo A de la Liga de Campeones de Europa, por delante del mismísimo Liverpool inglés, y clasificaron así a los octavos de final, donde se medirá al Frankfurt alemán.